Rollitos de torrija rellenos

¿Te animas a preparar estos Rollitos de torrija rellenos?

Loca. Reconozco que me vuelven loca las torrijas, y prueba de ello es que tengo varias recetas publicadas, como Torrijas clásicas, Torrijas al vapor, Torrijas de vino dulce o incluso este Trampantojo de torrija.

Y no sólo las hago para Semana Santa, porque de vez en cuando me gusta darme un homenaje.

Pero esta vez he rizado el rizo y, aunque a mí me gusta hacerlas con pan del día anterior y no utilizar pan especial de torrijas, las he hecho con pan de molde para poderlas rellenar nada más que, ¡de crema de cacao y avellanas!. Y como me parecía que todavía podía ponerles algunas calorías más, pues tomé el último tarro de mermelada de melocotón que me quedaba del verano pasado, y le puse una cucharadita a cada una.

¡Una locura! Hasta mis hijas, que no son torrijeras, se comieron un par cada una, y no comieron más porque sólo hice las que ves en la foto, si no, terminamos con un coma diabético en el hospital.

De manera que no sé si recomendártelas o aconsejarte que sólo mires la receta y te imagines un bocado crujiente y azucarado, muy tierno y jugoso y con sabor a nocilla. La mermelada sirve para darle acidez y hacerlas todavía más ricas.

¡Tú mismo!

Cómo preparar estos Rollitos de torrija rellenos, paso a paso:

Ingredientes:

• Pan de molde

• Crema de cacao y avellanas

• Mermelada

• Huevos

• Leche

• Aceite de oliva virgen extra, picual o cornicabra, para freírlos

• Azúcar y canela para rebozar

Preparación:

• Aplasta con un rodillo las rodajas de pan de molde, para que queden finitas y sea más fácil enrollarlas.

• Úntalas con la crema de cacao y avellanas

• Pon un poquito de mermelada en un extremo.

• Enrolla las rodajas comenzando por el extremo que tenga la mermelada para que quede en el centro una vez enrollada

• Bate los huevos y añade un chorrito de leche. Yo le puse medio vaso a dos huevos.

• Pasa por la leche los rollitos procurando que absorban bien la mezcla, y fríelos en el aceite de oliva vírgen extra a fuego medio-alto, hasta que queden doradas.

• Sácalos y deja escurrir sobre papel de cocina para que suelten el exceso de aceite.

• En caliente, pásalos por una mezcla de azúcar y canela para que quede bien rebozados.

• No duran de un día para otro. ¡Se acaban en seguida!!