Te propongo esta deliciosa Ensalada de habicholillas con vinagreta de miel y mostaza para empezar a cuidarte.
No sé a vosotros, pero después de las comilonas navideñas a mí me pide el cuerpo ensaladas y comidas ligeras.
La de hoy hará que te enamores de las habicholillas y es fácil nivel trolls con guantes de boxeo.
Las habicholillas o judías verdes, son originarias de México y Perú, y llegaron a Europa en el S XVI, siendo muy bien recibidas por el continente europeo. Y no es de extrañar, porque su sabor herbáceo y dulzón hace que hasta crudas estén buenísimas.
Además son muy digestivas y poco calóricas, por su gran cantidad de agua, pero son una fuente importante de potasio y calcio.
Son muy versátiles y admiten infinidad de preparados, como la Ensalada de patatas y judías verdes, las Habicholillas esparragadas, las Habicholillas estofadas, o una de las formas más ricas para disfrutarlas: rebozadas (boquerones de huerta las llamamos por aquí)
En esta ensalada, con la vinagreta de miel y mostaza, están de muerte. Puedes ponerle anchoas como yo, o cambiarlo por atún, mojama o jamón… o lo que tú prefieras. Los frutos secos picaditos le dan el toque divertido al comerlas, así que no prescindas de ellos.
¿Todo listo para tomar nota? ¡Pues ponte el mandil!
Cómo preparar la Ensalada de habicholillas con vinagreta de miel y mostaza, paso a paso:
INGREDIENTES:
- 200 g de habicholillas o judías verdes
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra (si es picual temprano, mejor)
- 3 cucharadas de vino blanco seco
- 1 cucharada de vinagre de Jerez
- 1 cucharada de mostaza de Dijon
- 1 cucharada de miel
- Sal y pimienta
Preparación:
Sólo tienes que cortar en tiras unas habicholillas o judías verdes y blanquearlas unos 3 minutos en agua hirviendo. No las ablandes demasiado que pierden la gracia.
Para que mantengan su color verde, enfríalas en agua con hielo.
Prepara la vinagreta con 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, que si es de un picual temprano vas a alucinar con el aroma tan fresco que tiene.
Añade 3 cucharadas de vino blanco seco, una cucharada de vinagre de jerez, otra de mostaza Dijon o si lo prefieres, a la antigua, y otra de miel, un poco de pimienta y una pizca de sal, y mezcla bien. Un tarro es perfecto para hacerla, y si te sobra, la metes en el frigorífico para otra vez
Ya sólo tienes que emplatar las habicholillas, ponerle las anchoas, aunque un poco de jamón también es perfecto, aderezar con tu super vinagreta y para terminar, ponle un toque crujiente con frutos secos picados. ¡Ya está lista tu Ensalada de habicholillas con vinagreta de miel y mostaza para que la disfrutes!
¡QUE APROVECHE!